La huerta de Igartubeiti y su entorno en junio
La huerta
En Igartubeiti, la huerta sigue en movimiento y poco a poco va adoptando nuevas formas y colores. El maíz parece que viene con mucha fuerza, ya han aparecido los primeros brotes, con un aspecto espectacular. Las lechugas, se expanden como una alfombra de tonos verdes y morados, dando frescura al huerto de Igartubeiti. Los pimientos también han resistido bien los días calurosos de mayo. Los seguiremos regando con mucha agua para que no piquen a la hora de comer. A partir de mediados de junio, el calabacín y la berenjena empezarán a dar su flor, de un amarillo muy vivo, y comestible. Y como no, las vainas, enrolladas en la estructura de avellano están espléndidas, ofreciéndonos todo tipo de figuras.
Lechugas de Igartubeiti
Además este mes, hemos plantado un nuevo producto en la huerta, el cogollo o “lechuga romana” (Lactuca Sativa). Esta hortaliza tiene cada vez más presencia en nuestras cocinas, generando nuevos paisajes en la huerta. Ya que ésta, al fin y al cabo es un reflejo de los gustos y costumbres de nuestras mesas.
En la huerta ecológica, las plantas aromáticas tienen su propia función. Este mes, hemos plantado perejil, que nunca suele faltar en nuestras cocinas. También tenemos albahaca. Su nombre significa “de buen olor”, y no le falta razón, si te acercas un poco te embriaga su delicado olor a limón. Esta planta, en la huerta se utiliza para ahuyentar a los piojos y las moscas, y se suele plantar entre los pimientos, berenjenas, tomates… Cerca de las lechugas y de los pimientos, hemos plantado romero, que al ser una planta del mediterráneo, necesita calor y luz. Su fuerte olor ahuyenta a las moscas, y además se usa para hacer ungüentos e infusiones.
Para que los productos que hemos plantado crezcan sanos, tenemos que cuidar la salud de la tierra. Por ello, hemos echado más abono orgánico en la huerta. Así, las plantas tendrán suficientes minerales para seguir creciendo.
El entorno
Junio también es un mes crucial para los cuidados del entorno. Con especial atención estamos vigilando los manzanos, ya que están en un momento decisivo de su ciclo. Ya han aparecido los primeros brotes de manzana y parece que este año podremos disfrutar de una buena cosecha. Seguiremos atentos/as durante el verano, ya que la manzana necesita mucha agua para crecer. Si no el fruto se queda pequeño y eso afectará a la producción de sidra.
En esta época, uno de los frutales que más activa nuestros sentidos, es el cerezo. Y este año no se ha quedado atrás. Junio ha aparecido vestido de cerezas con un tono rojizo impresionante. Además, este año los mirlos andan un poco despistados y está siendo un buen año de cerezas. ¡Tendremos que aprovechar!
En el entorno de la huerta el protagonismo se lo lleva la rosa-silvestre. Cientos de botones de un rosa delicado, que contrastan con el marrón madera del caserío, un lienzo especial.
Rosa Silvestre
Por último, no nos podemos olvidar de las plantas medicinales y otras plantas y árboles que están relacionados con creencias y tradiciones. Es momento de recoger diferentes plantas medicinales para hacer ungüentos y medicinas (Sanjuanera) y recoger ramas de fresno para poner en las puertas de las casas y caseríos en la Noche de San Juan. Con la ayuda de la naturaleza, protegeremos nuestras cosechas y nuestras casas de los malos espíritus.
Cuidados de la huerta, en colaboración con Jakoba Errekondo
-
Después de los días calurosos regar abundantemente la huerta. Conviene regar o bien por las mañanas o por el atardecer, cuando esté más fresco. Ya que si regamos en los momentos más calurosos, las plantas se cuecen y se secan.
-
Conviene tener un bidón en una esquina de la huerta, para que vaya llenándose con agua de lluvia, y de vez en cuanto mezclarle ramas de ortiga, para que el regadío sea más eficiente.
-
Echar la mezcla de tabaco, jabón y cola de caballo en las hojas de las plantas para los piojos.
-
Eliminar las malas hierbas de vez en cuando y remover la tierra con la azada para levantarla. Así el agua entra y sale más fácil.
-
Para controlar los caracoles y limacos: esparcir las cenizas del fuego bajo en las esquinas de la huerta. O insertar un vaso o un recipiente en la tierra llenándola con agua y cerveza, para atraer a las caracolas y a los limacos.
-
Es el momento de cortar la hierba de los prados y echar abono orgánico.