El trigo y la cebada, cosecha del mes de julio
El trigo y la cebada son las protagonistas entre las cosechas de julio. Si echamos un vistazo al entorno, en las tierras de la vertiente mediterránea del País Vasco, veremos que los campos tienen un color amarillo intenso, señal de que el trigo y la cebada están a la espera para su recogida.
A principios de mes, con la hoz en la mano, se segaba todo el trigal, se secaba y se llevaba la cosecha a la era para ser trillada. Hoy en día, teniendo en cuenta la lógica del mercado global, el modo de trabajo ligado a esta lógica y las condiciones de la gente del campo, es imprescindible la ayuda de la maquinaría para poder recoger la cosecha. Pero hasta la mitad del siglo pasado, entre los campos de trigo y cebada se podrían observar a los/as jornaleros/as cortando la cosecha con su hoz.
Las canciones, cuentos u otro tipo de referencias son representaciones simbólicas que nos narran aquellas realidades campesinas. O los molinos que se pueden observar hoy en día en las riveras de los ríos que en su día trabajaron sin cesar para abastecer a los terratenientes y después a los labradores, son también parte de ese paisaje cultural.