El salto al verano

El mes de junio es el mes que nos traslada de primavera al verano. La fiesta más conocida que celebramos este mes es la de San Juan​. Es una importante fiesta de origen antiguo que se celebra en el hemisferio norte con motivo del inicio del solsticio de verano el 24 de junio, especialmente en Europa. Sin embargo, el verdadero solsticio de verano, es decir, el día más largo de todo el año, suele ser el 21 o el 22 de junio. Es una tradición ancestral de origen pagano, que reúne ritos de regeneración; desde la Edad Media lleva el nombre de San Juan Bautista, un santo cristiano.

El acto más conocido de la fiesta de San Juan es la hoguera, que suele alumbrar la noche de la víspera de San Juan, y también recoge otros ritos y costumbres. En el País Vasco, por ejemplo, ese día se ha creído que es saludable limpiarse con el agua de algunos manantiales, charcos y arroyos, beber el agua de los mismos y pisar el rocío matinal del día de San Juan. También es habitual colocar en el portal de casa ramas de fresno, laurel y espino blanco para protegerlos del rayo.

El día de San Juan en el pueblo navarro llamado Urdiain, se realiza un ritual delante de la ermita, y allí nueve personas del pueblo cantan una canción. La canción termina realizando una petición: orain artean belar, hemendik aurrera gari (lo que hasta ahora ha sido hierba, que se convierta en trigo)