Historia de las piezas
Estas piezas, que hoy en día pertenecen a Gordailua (Centro de Colecciones Patrimoniales de la Diputación Foral de Gipuzkoa), llegaron al centro en el año 2008, en un lote con más objetos. La historia de este conjunto de piezas es casi desconocida. No sabemos con exactitud cuántos años tienen, ni quién las elaboró, ni a quién pertenecían. Solamente sabemos que provienen del pueblo goierritarra de Zerain.
El juego de bolos en el corazón de Goierri
El juego de bolos es un juego que es muy antiguo y está muy extendido. Su origen se ubica en el antiguo Egipto. Los romanos y los griegos también tuvieron alguna variación del juego de bolos, y de este modo poco a poco se fue expandiendo por toda Europa. No sabemos con exactitud desde cuando se practica aquí, pero sabemos que la tradición bolera ha sido muy fuerte.
La tradición del juego de bolos ha estado muy extendida por todo el País Vasco (tanto en Iparralde como en Hegoalde), pero en muchos pueblos la práctica del deporte ha desaparecido. Aunque, aún hay pueblos, como Zerain, en los que la tradición bolera ha perdurado hasta hoy en día.
El juego de bolos y su agencia narradora en la transformación del caserío
El bolatoki, el lugar donde se juega a los bolos, solía estar en lugares donde se reunía la gente. En sitios como una sidrería o una cantina, por ejemplo. ¿Porqué en estos lugares? Porque el juego de bolos estaba muy ligado a las apuestas. Mediante el juego decidían quién pagaba la ronda con fórmulas como: bostparlau, lauparhiru, lauparbost, etc. Estas eran las equivalencias; por ejemplo, en el lauparbost el primer jugador tenía que echar cuatro y el segundo para equiparar su juego debía echar cinco bolos.
Pero a partir de los años 60, junto con la despoblación rural y los cambios vividos a causa de la industrialización y los cambios sociales, este deporte empezó su decaída. Los modos de socialización fueron cambiando, y poco a poco las boleras fueron desapareciendo. Algunas se modificaron y se convirtieron en gallineros, y otras se quedaron bajo los cimientos de las nuevas casas y urbanizaciones. Las boleras perduraron en pueblos pequeños con gran arraigo a lo rural. Y estas se convirtieron en espacios deportivos poco frecuentados en el día a día. Pasaron de ser espacios cotidianos, a ser espacios ocupados en días especiales, sobre todo en fiestas del pueblo.
De la madera al nylon: cambios en el uso de los materiales
Estas piezas antiguamente se hacían con madera de encina (Quercus ilex), como las que vemos aquí. Pero estas necesitan de cuidados especiales para mantenerlas en buen estado. Hoy en día, se utilizan materiales sintéticos como el nylon o el polipropileno.
El cambio de materiales ha traído consigo grandes modificaciones. La primera es que las piezas actuales no necesitan tantos cuidados y esto ha traído a que la figura de la persona responsable de cuidar las piezas y la bolera poco a poco vaya desapareciendo.
Si quieres saber más puedes consultar el siguiente documento (PDF).
La trayectoria de las piezas:
Entrevista a la jugadora de bolos de Zerain, Aitziber Makazaga: