La segunda fase del trabajo arqueológico fue la documentación de las estructuras existentes. Para ello se numeraron una a una todas las piezas que componían el caserío, desde los pilares principales, hasta las piezas estructurales menores, mediante etiquetas de plástico de color azul con la numeración grabada, de las que se emplean para identificar cabezas de bovino. Para el señalamiento, adquiría particular importancia conservar la orientación de la pieza. Para lograrlo, se estableció y cumplió un protocolo. A continuación se dibujó y localizó cada una de las maderas, acompañándola de su número de identificación.
Modelo de etiqueta utilizada en el marcaje de la estructura del caserío
Toda esta información se plasmó en los planos, lo que permitió conocer la ubicación de cada pieza una vez desmontado el caserío.
Al estudiar las piezas de la estructura y conocer su ubicación en el edificio actual se pudieron identificar algunas que perteneciendo a la construcción original del siglo XVI, habían sido cambiadas de sitio y formaban parte de la ampliación del siglo XVII, como los postes de la fachada actual.
La señalización también garantizó la recolocación de las piezas en su lugar de origen durante la reconstrucción del caserío sin posibilidad de error para minimizar lo máximo posible la reconstrucción arbitraria de la estructura.
Además se realizó un registro de las piezas con anotaciones y comentarios en los que se recogían datos relevantes: cambios de ubicación, incorporaciones muy recientes, estado de conservación, etc., que se consideraron importantes para valorar los elementos que volvieron al edificio de forma íntegra o tratados con injertos y los que hubo que guardar o desechar por su singularidad en el primer caso, o por encontrarse en un estado irrecuperable o ser irrelevantes en el segundo.
Panel de tabla numerado, antes del desmontaje
Otro apartado importante dentro de la actividad de documentación fue la elaboración del molde de la estructura de habitación descubierta en el caserío.
Realizando el molde de la cabaña medieval